4 fases para un picking exitoso en logística

La logística es un mundo tan amplio como se pueda imaginar, es importante a la hora de organizarla al interior de cualquier negocio entender algunos términos importantes que la componen, el picking o preparación de pedidos es una de las fases más importantes de cara al cliente ya que si no se realiza de forma adecuada puede afectar la experiencia del mismo. Aquí queremos mostrarte las fases para un buen proceso de picking de manera que puedas aplicarlo y aumentar la calidad en tu logística.

 

Cuando tienes un negocio de distribución es importante que tengas establecido un proceso de picking o alistamiento de pedidos, básicamente este proceso debe tener como mínimo 4 fases, que dependiendo del tamaño y procesos internos de la compañía pueden ampliarse, estas fases son planeación, rutas de recogida, organización de artículos y finalmente preparación para distribución.  

 

Planeación:esta fase contempla el protocolo de trabajo que se requiere de manera interna para hacer el picking del producto, determina cómo se debe realizar cada proceso y establece las responsabilidades del capital humano interno.

 

En esta fase se reciben los pedidos y se debe compartir al preparador información importante para poder hacerlo de manera exitosa, una especie de check list, donde se incluyen especificaciones como referencia del artículo, ubicación del producto dentro del centro de almacenamiento, número de orden, observaciones, tipo de transporte que requiere y demás detalles relevantes. 

 

La implementación de sistemas de automatización como las ERP (sistemas de planificación de recursos empresariales) que faciliten la gestión de almacén y movimiento de inventario. 

 

Rutas de recogida y organización de artículos: en esta fase el personal de almacén, debe seleccionar los elementos para envío y extraerlos de sus estantes en orden y con la mayor organización de tiempo ya que si no se organizan las recogidas de producto se pierde demasiado tiempo y se da cabida a la mayor cantidad de errores. 

Para esto se recomienda organizar las rutas de recogida teniendo en cuenta la cercanía de ubicación de productos, distancias de recolección cortas, fácil acceso a la mercancía para optimizar y ahorrar tiempo. 

 

Esta es quizá la fase más riesgosa del proceso ya que es donde el operario puede llegar a cometer errores de selección y cruzar o equivocar las órdenes para cliente, es por eso que se recomienda también el uso de sistemas y tecnología que permita la lectura de códigos y automatizaciones en el proceso.

 

Preparación para distribución: esta fase final contempla el proceso de preparación para distribución,  consolidación, embalaje y empaque previstos según las características y necesidades del producto. Lo ideal es realizar una nueva verificación del alistamiento, calidad de la consolidación y embalaje para ubicar la entrega en el punto de carga para la recogida del transportista. 

 

En todos los casos se recomienda la implementación de una ERP que permita la digitalización y automatización de los procesos para hacerlo más eficiente y disminuir la posibilidad de errores.